La mayoría de las personas suele tenerle miedo al Buró de Crédito o al Círculo de Crédito, que son aquellas instituciones dedicadas a proveer información del comportamiento crediticio de las personas a bancos, financieras y otras empresas.
Para aparecer en estas instituciones no es necesario haber hecho algo mal, basta con tener algún tipo de crédito para que tu historial crediticio empiece a fluir. Lo que toca a partir de ese momento es mantenerlo limpio, es decir, un buen historial que te permita ser reconocido como un buen pagador.
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Para que esto sea posible, no olvides tomar en cuenta los siguientes pasos:
1. Sé puntual en los pagos:
La principal razón por la que nuestro historial crediticio comienza a decaer es porque nos atrasamos en los pagos, lo que nos reporta como morosos. Anota las fechas y tenlas muy presente, para que así evites toda clase de atrasos.
2. No saques más créditos de los que necesitas:
Abusar de nuestra capacidad de endeudamiento es otro error. Cuando solicitamos más y más créditos para pagar nuestras otras deudas o adquirir nuevos bienes, reducimos nuestra capacidad de endeudamiento, lo que no es visto con buenos ojos ante las instituciones financieras.
3. No abuse de las tarjetas de crédito:
Gastar más del 30% de tu línea de crédito cada mes tampoco es buen signo, ya que muestra que no tienes mucho control de tus gastos, por lo tanto no beneficia a tu historial.
Sigue estos pasos y protege tu reputación financiera, para que al momento de solicitar un crédito más grande, como uno hipotecario, no haya problemas al otorgártelo. Por supuesto, no olvides que antes de solicitar aquel crédito, debes comparar bien todas las ofertas.