Lo que más llama la atención sobre los préstamos inmediatos es justamente eso, que son casi instantáneos. La aprobación del crédito se da en minutos y no se necesitan muchos requisitos para acceder a uno, pero a pesar de eso sí existen casos de personas a las que se les negó el préstamo, quizás porque tenían problemas financieros generalizados o porque no brindaron los datos correctos.
Algunos de los “rechazados” desisten en su idea mientras que otros recurren a una táctica diferente. Pedirle a un familiar o un amigo cercano que saque el préstamo por uno es una táctica no tan nueva, pero que ha traído consecuencias desastrosas para muchas personas.
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La verdad es que aceptar pedir dinero para otra persona no es algo recomendable, ya que por más que se trate de la misma sangre o de un amigo casi hermano, es darle a esa persona la responsabilidad de mantener a salvo su reputación financiera, ya que si llegara a atrasarse en alguno de los pagos, quien tendrá que responder por ese atraso será usted, pues su nombre está en juego.
Imagine que los atrasos se acumulen y que luego de unos meses es ahora usted el que necesita solicitar financiamiento para algún proyecto personal. El banco revisa su historial y verifica que hubo semejante atraso, lo que guía a que rechacen su solicitud. Es por eso que al momento de evaluar pedir dinero para otra persona hay que tener los ojos bien abiertos.
No es una opción recomendable, ya que de alguna manera incluso está engañando a la microfinanciera. Piénselo bien y si va a solicitar un crédito, ¡que sea para usted! Pero sea igual de prudente al elegir sus opciones y primero tome unos minutos para y ver cuál es la que más le conviene.