Aunque no lo crea, el sueño de convertirse en propietario y por fin adquirir una vivienda, puede verse empañado por diferentes elementos. Uno de estos casos se da cuando decide adquirir una vivienda usada.
Hoy en día son muchos los mexicanos que optan por esta opción. Una de las ventajas de comprar una casa o departamento que ya ha sido ocupado antes, es que puede encontrar ocasiones de venta que son realmente provechosas, ya sea debido a una deuda urgente que cubrir o lo más común, por motivo de viaje.
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No deje de leer ¿Conviene la vivienda usada o la compra en preventa? Sin embargo, hay un aspecto que no debe descuidar al adquirir un inmueble usado y tiene que ver con el marco legal. La única forma de evitar sorpresas desagradables es comprobar cuál es la situación legal de la vivienda y de las personas con las que estará tratando la compra.
Asegurarse de que la documentación es la correcta y que todo sea expresado con claridad, lo librará de un posible fraude. Además, averigüe también por los pagos de los servicios básicos del inmueble, ya que podría terminar cargando consigo una deuda ajena. Pero tranquilo, que no tendrá que hacer este trabajo solo.
Recuerde que al solicitar el crédito de vivienda, la institución financiera también se encarga de hacer un estudio del inmueble y de informarle si se encuentra apto o no para la compra. El precio del estudio algunas veces está incluido en el monto total del crédito, mientras que otras instituciones deciden no cobrarlo o cobrarlo aparte.
Esa es una de las condiciones que debe tomar en cuenta al elegir a quién le solicitará el préstamo. No se pierda: ¿En qué colonia bajaron más los inmuebles? Para obtener un mejor panorama de los créditos de vivienda, tasas y beneficios, puede realizar la comparación entre todas las opciones, utilizando el comparador de créditos hipotecarios de Comparabien.